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jueves, 18 de febrero de 2010

ALGAS VERDEAZULES Y BACTERIAS parte2



La Rivularia se une a un hongo y forma la Lichina, un liquen común de las zonas entre mareas.


Las algas verdeazules consiguen reproducirse con aventajada aceleración, atestando las aguas de ríos y lagos en el transcurso de escaso período de tiempo.
La existencia de Oscillatoria esythrea ha proporcionado color al mar Rojo y de ahí su nombre.
La habilidad de las algas verdeazules para hacerse servir del nitrógeno atmosférico y el bióxido de carbono como nutriente les ha facultado para sobrevivir en condiciones muy áridas. Consiguen colonizar extensiones superficiales volcánicas recién refrigeradas, y representar un significativo cometido en el fortalecimiento del terreno en el intervalo entre mareas de las islas volcánicas de nueva formación.
Las bacterias marinas son incontables y más abundantes en torno a las costas, pero en el océano abierto pueden vivir adyacentes al fitoplanton y en las superficies constituidas por animales planctónicos y por detritus.
Las cianobacterias son en general organismos fotosintetizadotes Muchas son saprofítas, y pueden degradar cualquier clase de materia orgánica, desde quitina, celulosas, mucinas y grasas hasta petróleo bruto. Aunque por lo general son bastante escasas en los océanos, mantienen un equilibrio que les permite explotar ventajosamente las situaciones cuando se reproducen masivamente, como hacen las algas. Otras tienen un importante papel en el ciclo de nutrición, fijando nitrógeno atmosférico y convirtiendo los nitritos en nitratos. Su importancia en el mar es tan grande como en tierra. Las bacterias son demasiado pequeñas para ser absorbidas por la mayoría de los animales que se nutren por filtrado, pero los especiales mecanismos de captación de alimentos de los larváceos pueden conseguirlo y además se mantiene el equilibrio por medio de antibióticos que producen las diatomeas .
Con el continuo vertido por parte del hombre de grandes cantidades de desechos industriales y de aguas residuales en los ríos y océanos, la misión de las bacterias de disolver estas substancias, potencialmente peligrosas, se está haciendo crítica, se pretendemos que el océano permanezca limpio, al menos nominalmente.

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